Sincerament hubiese querido traer buenas noticias a este blog, pero no es lo que me tocó.
Hace unas semanas tuve la alegria de hacerme y obtener un test positivo de embarazo. Si, de no creerlo, estaba o estoy, todavia sigue la discusión, embarazada. Algo que no puedo decir me tomó de sopresa, porque todas las que transitamos por el camino de la infertilidad, rogamos en el fondo, vencer la maldición, y pasarnos a la vereda del mundo fertil. Y yo lo estuve, bah, por casi 3 semanas consciente.
No vayan a pensar que me la crei desde el primer dia de atraso....no, me aguanté 4 dias para hacerme el primer test y salio un “NI”, ni si, ni no....dos tenues rayitas. El segundo test al dia siguiente fue un positivo mas evidente. El tercer test positivo a los cuatro dias, en compañia de mi marido (tan incrédulo como yo) y el cuarto a los dos dias de nuevo. Llamenme maniática, pero recien a la cuarta vez tomé fuerzas para ir al médico de cabecera y pedirle una beta. Resultado a la semana: 2100. O sea embarazo.
Yo seguia incredula, pero empecé a tomar precauciones, por las dudas sea verdad: hice mi cita con la “obstetra” ( o mas bien, proyecto de obstetra, porque no son medicas), alias comadronas. Esperamos dos semanas y en el comienzo de mi supuesta septima semana de embarazo, nos recibió esta mujer con sus brazos abiertos, felicitandonos con sonrisa de propaganda de dentifrico por haber roto la maldición y asegurando que de ahora en mas ya estabamos en la vereda fertil. Yo tenia mis sospechas, pero acompañadas con vómitos, cansancio y dolor de mis diminutos pechos, empezaba a aflojar mi coraza.
Y zas! Llegó el baldazo de agua fria de la mano de la ecografia. Eso fue hoy: saco embrional ubicado perfectamente, embrion pegado como garrapata, pero.....si, perooooo: cero actividad cardiaca. Y medición entre las 5 y 6 semanas, cuando deberia estar en la 7ma semana. Mi poca confianza se derrumbó al ver a mi marido desmoronarse. No sé de donde saqué fuerzas y le dije: “ya está. Se acabó. Punto.Etapa cerrada”. Si, la negación es mi mejor aliada. Con semejante noticia, volví a mi trabajo como si nada y hace un rato, al llegar a casa lloré.
Discutí con la comadrona por telefono, porque no piensan hacerme otra ecografia la semana que viene. Me voy de vacaciones por 4 semanas el proximo miercoles y eso es mi responsabilidad. No la de ellos, si me muero desangrada o de dolor en alguno de los aeropuertos, o dejo coagulos en el avion. Quizas llegaré a hacer un legrado en mi pueblo natal, en compañia de mi familia. No pierdo esa esperanza.
Considero que esto no es mas que una muestra de lo que nos tocó y no me pregunto:
por qué a mi? En realidad me pregunto: “
por qué no me iba a tocar a mi?” Le pasó a tantas de mis amigas virtuales: Sole, Co!, Vani74, maria laura (PM), Tonalli (PM) y la lista sigue...
Quien creia yo que era para considerarme fertil y burlar el destino? No veo estrellas en mi cielo, solo nubarrones negros.
